Generalmente el sistema de aire acondicionado del automóvil requiere de poco mantenimiento, su tiempo de vida obedece a horas de funcionamiento. La vida útil del gas refrigerante R134 es de dos años, ya sea que se utilice o no el sistema.

 

El manual del propietario cuenta con las indicaciones básicas de operación, pero si necesita un arreglo este sistema no posee partes que puedan ser arregladas sin la ayuda de un especialista. La mayoría de las fallas incluyen fugas en mangueras, roturas o la falta de gas refrigerante.

 

Para mantener el sistema de aire acondicionado en óptimas condiciones hay que seguir las siguientes indicaciones, no se requiere de mayor ciencia o habilidades técnicas para darle un mantenimiento preventivo.

 

Cuando haya que añadir líquido refrigerante debe ser uno de buena calidad o el recomendado por el fabricante. Una carga de gas refrigerante completa puede rondar entre los 300 pesos y hasta los 500 pesos, de acuerdo al tipo de automóvil que se quiera recargar.

 

El tiempo de la recarga es al menos de 30 minutos, ya que se requiere supervisar por unos cuantos minutos su funcionamiento para ver si no existen fugas que puedan hacer fallar el aire acondicionado.

 

Se recomienda no usar el aire a máxima potencia a menos que sea indispensable, antes de apagar el motor apague primero el aire acondicionado el climatizador dependiendo de cuál tenga, hágalo funcionar por unos minutos cuando hayan pasado muchos meses sin usar por ejemplo en el invierno.

 

Revise que la tubería, las juntas, mangueras y el radiador estén operando de manera regular.

 

Si su auto tiene aire acondicionado y no lo ha hecho funcionar por algunos meses déjelo funcionar por algunos minutos para expulsar los polvos y basuras acumuladas en los ductos.

 

En época de frio se debe encender el sistema de aire durante unos minutos, por lo menos una vez al mes, para hacer circular el fluido y así evitar que las juntas de unión de las tuberías y los componentes se resequen.

 

Al acercarse el verano es conveniente revisar y limpiar todo el sistema de refrigeración del automóvil, especialmente el radiador, ya que este elemento funcionara más exigido y por más tiempo. Limpia el exterior con agua y detergente, revisa el nivel y cambia el líquido refrigerante cada dos años.

 

Mantén limpio el radiador, no lo obstruyas con un antifaz de plástico ya que evita que el aire cumpla con su función de enfriar el radiador.

 

El mantenimiento preventivo es fundamental para evitar problemas y prolongar la vida útil del automóvil, pero también para un buen uso cotidiano.